Sigue NN el cadáver calcinado: crece el misterio y la incertidumbre

A casi una semana del hallazgo de un cadáver calcinado y con un disparo en la cabeza, la Justicia busca por todos los medios posibles identificarlo y determinar quién o quiénes lo mataron y lo tiraron en un camino vecinal, en el paraje La Victoria.

Los días pasan y no saber quién es la víctima desvela a los investigadores que por estar horas analizan cada detalle que se encontró en el escenario —supuestamente montado— donde encontraron el cuerpo de un hombre envuelto en llamas.

Hasta el momento se supo que nadie se presentó en la policía para denunciar la desaparición de alguna persona con las características de la víctima —de 45 años, aproximadamente, de unos 1.70 m de altura, robusto— por lo que el misterio continúa.

Como se recordará, lo único que se halló en la macabra escena fueron restos de una remera con el escudo de Central Córdoba, por lo que haría suponer que la víctima sería de nuestra provincia, pero no se descarta aún la hipótesis de que sea un foráneo.

Los investigadores —que trabajan bajo las órdenes del Dr. Hugo Herrera— hasta el momento habrían establecido que la víctima tiene una herida de arma de fuego a la altura de la sien, y que habría sido trasladada en una camioneta.

Mientras tanto, esperan que el día viernes llegaría a la Fiscalía el informe de las empresas de compañías móviles que indicarán cuántos celulares —y las identidades de sus dueños— se encontraban en la zona en un margen de 6 horas antes del hallazgo de cuerpo. 

Huellas dactilares de la víctima, insertadas en programa nacional

Cuando el Dr. Herrera —fiscal de la causa— solicitó la autopsia del cuerpo en junta médica, requirió a los galenos la extracción de material genético y además de las huellas dactilares de la víctima.

Pese a que el fuego consumió el 95% del cuerpo, los forenses lograron obtener el registro dactilar de la víctima, lo cual fue incorporado a todos los registros provinciales para lograr establecer de quién se trata.

Hasta el momento, a nivel local no se logró determinar quién es la víctima, por lo que la Justicia decidió que las huellas sean enviadas también a los registros nacionales con el propósito de identificarlo lo antes posibles.

Mientras tanto, los peritos informáticos analizan minuciosamente las imágenes de las cámaras de seguridad halladas durante los posibles recorridos que podrían haber hecho los autores del brutal asesinato.

Además, se reitera desde la Justicia que se recurre a la colaboración de la sociedad, solicitando a quien pueda brindar datos sobre la posible identidad del occiso a los fines de avanzar en la investigación y dar con él o los presuntos asesinos.