Camionero y remisero, acusados de integrar banda que se alzó con $ 40.000.000 en "estafas" de autos

Un camionero y un remisero fueron detenidos ayer en La Banda y en Los Pereyra, Capital, sospechados de ser eslabones en una larga cadena delictiva con documentación apócrifa en el submundo de la venta de autos "truchos", con ganancias actuales de hasta $40.000.000.

Los operativos fueron ejecutados por el Departamento de Delitos Económicos de la Dirección General de Investigaciones, a solicitud de la fiscal Carla León. Según una de las víctimas, efectuó un intercambio de vehículos, pero perdió su coche usado y le incautaron el nuevo.

Ahondó que entregó su Volkswagen Polo a los detenidos a cambio de un Vokswagen Virtus. Sin embargo, la documentación era falsificada. También entregó dinero y lo perdió.

Los Pereyra y Banda

Extraoficialmente, se sabe que en Los Pereyra cayó preso un remisero de apellido Ovejero y en La Banda, un camionero de apellido Paiba. La denuncia fue interpuesta por el procurador Fabio Cisneros y la abogada, Raquel Ana María Gutiérrez.

"Asociación ilícita, estafa, encubrimiento, extorsión, fraude al comercio y la industria", serían los delitos dominantes. Para los denunciantes, al menos ocho personas fueron defraudadas con ventas de vehículos sin documentación respaldatoria.

En diálogo con EL LIBERAL, Cisneros indicó que a su estudio, que complementa su esposa abogada, arribó una víctima. La presunta banda que la habría defraudado "opera con la venta de un vehículo con pedido de secuestro por robo en Córdoba. Fue vendido a nuestro representado en una maniobra fraudulenta que involucraría la falsificación de firmas de varios escribanos", resaltó Cisneros.

La denuncia amplía que los damnificados no son todos santiagueños. También habría gente del Chaco, Catamarca y Tucumán. El rostro visible de la banda sería un llamado "contador", denunciado por un profesor por estafa. El profesor le habría entregado un Citroën valuado en $ 3.000.000. El vendedor le dio, a cambio, un Volkswagen por $ 5.000.000. La diferencia fue pactada en cuotas de $ 20.000. La policía detuvo al profesor en la calle e incautó el coche por pedido de secuestro de Tucumán.

Captación y cobranza

Los dos sospechosos integrarían un grupo umbanda. La denuncia les endilga los roles de "captar" a los clientes y la "cobranza" de las cuotas, una vez materializadas las operaciones.

Esa función, la de refrendar las condiciones de venta, le es enrostrada al "contador" de la supuesta organización, oriundo de la provincia de Córdoba, enfatizaron los investigadores.