Intentó asaltar a una mujer, baleó a un joven, pero fue reducido por vecinos y entregado a la policía Intentó asaltar a una mujer, baleó a un joven, pero fue reducido por vecinos y entregado a la policía
La jueza de Control y Garantías, María del Huerto Bravo Suárez, convirtió en detención la aprehensión de un motociclista, que fue reducido por varios vecinos al intentar asaltar a una mujer que hacía gimnasia y pegarle un tiro al hermano de la víctima cuando intervino para defenderla.
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El imputado fue identificado como Luis Humberto Pereyra, 27 años, con domicilio en Vaca Huañuna (Figueroa) a quien los policías secuestraron un revólver calibre 22 largo.En el momento del atraco, vecinos de la zona lo redujeron y ataron sus manos con una soga.
Peligro
Según la investigación de la fiscal Celia Mussi, el grave hecho se registró el 6 de diciembre en La Invernada Norte (Figueroa) a las 22.
La damnificada resultó Gisele Micaela Barrientos (29). En diálogo con la policía habría declarado que mientras circulaba por un camino vecinal y ruta 2, 300 metros antes de arribar a su casa fue interceptada por un desconocido en una motocicleta Zanella ZB 110 cc.
Barrientos caminó con rapidez, pero el sujeto la alcanzó, extrajo un arma de fuego y le exigió que le entregara su celular. La mujer accedió y el desconocido guardó el arma, ocasión en que la mujer ofreció resistencia y comenzó a forcejear con el delincuente.
La damnificada gritó pidiendo ayuda y apareció su hermano, Axel Barrientos, de 21 años, quien acudió en defensa de Gisele. En ese momento recibió un tiro en el brazo izquierdo. Para entonces, tres vecinos ya habían rodeado a Pereyra, a quien redujeron en escasos segundos e inmovilizaron con una soga.
Al arribar la policía, Axel fue llevado al Hospital Zonal de Bandera Bajada y Pereyra entregado a la policía de esa jurisdicción, imputado por "robo calificado en grado de tentativa en perjuicio de Micaela" y "lesiones en perjuicio de Axel Barrientos.
Ahora, Pereyra seguirá preso, ya que la jueza Bravo Suárez ordenó su detención por un plazo de diez días. Por ende, la Fiscalía ganó tiempo clave para munirse de más pruebas: testimonios de varios testigos, informes médicos sobre las secuelas de las heridas en Axel Barrientos, pericias psicológicas para todos los protagonistas e indagar en los antecedentes del detenido.
Le fue secuestrada un arma de fuego y la funcionaria aguarda un informe sobre su origen y si el imputado contaba con permiso para su portación.
