Desgarradora escena para un padre que buscaba a su hijo y lo encontró mutilado en las vías del tren

Un amanecer macabro para los vecinos de los barrios 25 de Mayo y El Rincón de la ciudad de La Banda, despertados por los gritos desgarradores de un hombre que salió a buscar a su hijo y lo encontró mutilado, sin vida, sobre las vías del tren.

Un escenario dantesco, digno de una película de terror, fue el que se vivió Raúl Alberto Mendoza, cuando se despertó y salió a buscar a su hijo —Ramiro Santiago Mendoza (28) — quien había salido en horas de la noche del jueves y no había regresado a dormir.

Acostumbrado a que circulara fuera del horario permitido o en la calle, Raúl se dirigía a la Policía a buscar al joven, pero cuando llegó a las vías del tren —frente al barrio 25 de Mayo— observó con poca claridad que "algo" había sobre los rieles.

De inmediato se acercó a ver qué sucedía y allí descubrió el peor escenario. El cadáver de su hijo estaba tendido, con uno de sus miembros inferiores seccionado. Los gritos de la víctima alertaron a los vecinos, quienes corrieron a ayudarlo.

Otros familiares —según informó la policía que trabajó en el lugar— también se hicieron presentes en el lugar.

Personal de la Comisaría 56 tomó intervención y alertó de inmediato al Dr. Hugo Herrera —fiscal de turno— quien junto a su instructora Dra. Nieve Bravo, se hizo presente en el escenario del sombrío hallazgo.

Junto a las autoridades fiscales llegaron los efectivos de la División Homicidios y Delitos Complejos, quienes comenzaron con las averiguaciones para determinar qué fue lo que sucedió fehacientemente sobre las vías.

Allí los efectivos se entrevistaron con su padre, quien manifestó que la víctima había salido la noche del jueves de su casa y se encontraba ingiriendo bebidas con alcohol, junto a un grupo de amigos.

El joven al parecer había mantenido una discusión con su padre antes de salir a la casa.

Ante la incrédula mirada de los lugareños, por el trágico hecho, los peritos de la Policía Científica realizaron trabajos de fotografía y planimetría.

Además por orden del Dr. Herrera, el médico de Sanidad examinó el cadáver e indicó que la víctima —apodada "Loli"— tenía seccionada la pierna derecha hasta la altura del tobillo, la cual no se encontraba en el lugar. Su pie había quedado dentro de una bota.

El cadáver no presentaba lesiones y los signos de desgarro se podían ver sobre las vías, lo que hacían suponer que fue arrollado por un tren carguero, que podría haber pasado cerca de las 4 de la mañana. Por orden del Fiscal, los detectives secuestraron las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona.

Hasta ahora se manejan dos hipótesis: podría tratarse de un suicidio o de un accidente, ya que la víctima podría haber quedado dormida sobre los rieles.

Un miembro fue llevado por los perros a una vereda

Mientras los peritos realizaban trabajos sobre el cadáver de la víctima, otro grupo de efectivos iniciaron un rastrillaje por la zona para buscar el miembro inferior de Mendoza y a unos 200 metros lograron encontrarlo.

Un perro se encontraba en la vereda de una casa comiendo los restos de la víctima. De inmediato los uniformados alertaron al fiscal, quien se dirigió al lugar y supervisó el trabajo de levantamiento.

Según se supo, el cadáver también presentaba una mano mutilada desde la muñeca, y a pesar de la búsqueda, no se la encontró, lo que sospechan es que fue devorada por los caninos.

Consternación en su familia

Escenas desgarradoras se vivieron ante el llanto desconsolado de los padres de la víctima, quienes no lograban entender lo sucedido.

Según revelaron las fuentes judiciales y policiales consultadas, el joven ya había sufrido años antes un accidente con el tren, cuando se quedó dormido sobre las vías y la locomotora rozó uno de sus miembros y lo fracturó.

La Fiscalía no descarta ninguna hipótesis y por ello solicitó que se tome declaración testimonial a todos los jóvenes que habían estado con él ingiriendo bebidas. Además el Dr. Herrera solicitó que se le realicen al cuerpo pericias toxicológicas.