“Pudimos recibir el año nuevo en familia, disfrutando de un cielo lleno de luces”

“Celebramos por las más luces y menos ruidos. Felizmente pudimos despedir el año viejo y recibir al año nuevo todos juntos en familia, disfrutando de un cielo lleno de luces”. Con esta declaración festiva, la mamá de un niño con autismo figuró la realidad de muchas familias santiagueñas que el jueves por la noche vivieron una celebración especial, fruto de la campaña “Más luces, menos ruido”, que hace ocho años impulsa la Asociación “Santiago Azul TEA” que nuclea a familias de chicos con trastorno del espectro autista.

Pidieron a los santiagueños utilizar fuegos artificiales para festejar la Navidad y la llegada del 2021, y si bien hubo mucha gente que aún no se unió a la campaña y decidió celebrar con los estruendos, tan dañinos para las personas con autismo, fueron muchos más los que se pusieron del otro lado, e iluminaron la noche, descartando el uso de explosivos.

“Si bien hubo muchos estruendos, mucho más que en Navidad, que igualmente era lo que esperábamos, el 85 por ciento del uso de estruendo disminuyó en los últimos años. Hubo zonas, como las del sur, en la que fue complicado, ya que hay gente que todavía no entendió el daño que provocan con sus bombas. Sin embargo, la mayoría optó por las luces y eso nos pone felices porque fue un paso más a nuestro objetivo”, expresó Patricia Zírpolo, referente de Santiago Azul TEA, en diálogo con EL LIBERAL.

En ese sentido detalló: “Tenemos registros de que por la zona de Sauce Bajada, por ejemplo, no hubo estruendos, prácticamente; en La Banda lo mismo. Hay que reconocer que hubo más que en Navidad, pero sin dudas, mucho menos que el año pasado. En Forres se hizo una excelente campaña, y también celebramos la disminución de las bombas en casi toda la provincia”.

Vale indicar que en Forres, los comerciantes concienzudamente sólo trajeron para vender pirotecnia de bajo impacto sonoro, y vecinos se sumaron y lanzaron millones de luces al cielo.

Apoyo

Zírpolo también destacó el trabajo del personal de la Dirección de Calidad de Vida de la Capital y La Banda, “ya que se hizo decomiso de bolsas de estruendo a quienes comercializaban ilegalmente”.

“También tuvimos que denunciar estas ventas porque suma a nuestro objetivo, al que vamos paso a paso. Pero vamos por más. Nosotros buscamos que sean ley los festejos libres de estruendos, pero ahora vamos por la educación. Tenemos que educar a las generaciones que vienen para que el uso de lo que hace daño quede a un lado”, sentenció.

“Queremos una sociedad 

en la que, más allá de la inclusión, se pueda convivir”

Sobre los proyectos para este año, desde Santiago Azul TEA remarcaron que se acentuará en la concientización.

“Sabemos que la situación emocional y económica ayudó demasiado, pero creo que la sociedad en especial, y las personas con autismo y sus familias, debemos unirnos cada vez más para hacer campañas en los lugares en donde fue más fuerte el uso de pirotecnia explosiva. Hay que hacer un trabajo más personalizado. Debemos llegar a esos barrios, visitar a cada vecino, explicarles por qué necesitamos que no se usen los estruendos. Hay que seguir luchando por nuestros hijos, por quienes sufren. Queremos una sociedad en la que, más allá de la inclusión, de pueda convivir. Estamos trabajando en los proyectos para este año con este tema”, sostuvo Patricia Zírpolo.