Condenaron al docente de Nuevo Líbano a 8 años de prisión por abuso Condenaron al docente de Nuevo Líbano a 8 años de prisión por abuso
El docente de Nuevo Líbano acusado de haber abusado sexualmente de su hijastra y, además, haber corrompido a sus alumnos en un establecimiento educativo del interior del departamento Banda, fue condenado a 8 años de cárcel por las vejaciones a la hija de su ex pareja y fue absuelto por las supuestas prácticas sexuales a las que instó a sus estudiantes.
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El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, integrado por los Dres. Daniela Campos Nittinger, Graciela Viaña de Avendaño y Juan Carlos Storniolo, analizaron lo vertido durante el debate oral por las partes y sentenciaron al sospechoso por una de las dos causas que tenía en su contra.
Originalmente “C.A.L.” fue acusado del supuesto delito de “abuso sexual con acceso carnal”, en perjuicio de la hija de quien por entonces era su pareja.
La denuncia data del 2014, cuando la adolescente tenía 13 años, pero reveló que los abusos ocurrieron entre los 8 y los 10 años, tiempo en el que el denunciado convivió con su madre.
En forma paralela, la directora de la escuela de la localidad de Nuevo Líbano, había denunciado al docente por supuestas prácticas sexuales a las que sometía a los niños, por lo que fue imputado por el supuesto delito de “corrupción de menores”.
El juicio fue casi tan dilatado como la investigación, iniciada hace 6 años. El debate comenzó en agosto y tuvo varias suspensiones. En las diferentes audiencias se tomaron numerosos testimonios, se proyectó la Cámara Gesell de la víctima de los abusos con su testimonio, así como también la de los alumnos del sospechoso.
Declararon docentes, familiares, padres de estudiantes, entre otros. También desfilaron psicólogos, forenses y demás peritos que intervinieron en la causa.
Solicitud
En sus alegatos, la Fiscalía, representada por los Dres. Alicia Inés Presti de Munar, Hugo Herrera y Cecilia Pacheco, solicitaron una pena de 10 años de cárcel por el abuso en perjuicio de la adolescente, mientras que requirieron que también sea condenado por “corrupción de menores”.
La defensa, representada por el Dr. Francisco Palau, solicitó la absolución de su cliente por el beneficio de la duda, al considerar que no estaban acreditados los hechos de los que se lo acusaban.
Finalmente, el tribunal resolvió condenar a “C.A.L.” a 8 años de prisión por el delito de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado”, es decir que modificaron la calificativa y lo absolvieron por el beneficio de la duda en lo que respecta a la “corrupción de menores”.
La Fiscalía analizará si recurre o no la sentencia
La Fiscalía analizará si recurre o no la sentencia
La denuncia de las autoridades de la Escuela de Nuevo Líbano, se basaba en dos supuestos actos a los que el acusado instaba a sus alumnos. El primero a besarse en la boca entre ellos y el segundo a pelear por dinero.
El acusado siempre negó los hechos y durante el juicio deslizó que todo ello había sido “una cama”.
El Tribunal consideró que no estaba acreditada la “corrupción de menores”, por lo que lo absolvió. Ahora, la Fiscalía analizará su recurre la sentencia una vez que conozca los fundamentos del veredicto. La defensa, también apelaría la condena, insistiendo en su absolución.
Prófugo, con una identidad falsa
“C.A.L.”, fue denunciado en 2014 y desde ese momento se inició un dilatado proceso penal en su contra, por el que estuvo detenido dos años, luego recuperó la libertad, ordenaron nuevamente su captura, permaneció prófugo y fue detenido en 2017.
La denuncia formal la radicó la madre de la menor en el año 2014. En ese momento la adolescente tenía 13 años, pero los supuestos abusos habían ocurrido cinco años antes, cuando el acusado convivía con la mujer -era su pareja- y la menor.
Mientras se investigaba ese hecho, también fue denunciado por autoridades de la Escuela de Nuevo Líbano, después de que salieran a la luz, supuestas prácticas inapropiadas de índole sexual, a las que habría obligado a realizar a sus alumnos adolescentes y niños.
La Fiscalía de La Banda lo imputó por ambos delitos y quedó detenido con prisión preventiva, pero después el fallo fue revocado y le otorgaron la libertad.
Esa resolución también fue recurrida y cuando ordenaron nuevamente su detención, éste ya se había dado a la fuga. En enero del 2017 fue recapturado en la provincia de Córdoba con una identidad falsa.
