Gendarmes locales detienen a contrabandistas que llevaban hojas de coca y cigarrillos ilegales

Una dotación de efectivos de Gendarmería Nacional -de la sección operativa de vuelo de Santiago del Estero- que viajaba a realizar una misión humanitaria en la frontera norte interceptó a un grupo de contrabandistas que viajaba por el río.

Según se supo, el helicóptero descendió al margen del río y logró desbaratar a una banda que traficaba hojas de coca y cigarrillos sobre el límite mismo de la Argentina con la República Plurinacional de Bolivia.

La arriesgada acción, según se supo, ocurrió cuando una nave, perteneciente al Escuadrón de Santiago del Estero, se trasladaba a la zona de la frontera norte para realizar tareas humanitarias.

Los gendarmes tenían la misión de llevar medicinas y soportes de salud a distintos poblados y puestos sanitarios de la frontera por la pandemia mundial y allí fue cuando hallaron -en pleno vuelo- a un grupo de contrabandistas casi en el límite entre las dos naciones.

Inmediatamente se inició un operativo, de alto riesgo y en condiciones extremas, sobre la selva de las márgenes del río Tarija, en jurisdicción de Aguas Blancas, donde un grupo de contrabandistas estaban traficando bultos en la modalidad de jangada, es decir navegar sobre los bultos a favor de la corriente.

Rescate

Al advertir el contrabando y el ingreso de personas furtivas al territorio nacional, el helicóptero sobrevoló a los traficantes haciendo que los mismos se echen al agua y a nado ganen la orilla, informó el diario El Tribuno en su edición digital.

Al no haber camino para secuestrar los bultos, que a esa hora de la tarde no se podía precisar qué tipo de mercadería escondían, los efectivos humanitarios dispusieron un aterrizaje de emergencia sobre una ribera del río, y luego a nado alcanzaron los bultos y los acercaron hasta la orilla, donde quedaron decomisados.

Tras la exitosa maniobra, los gendarmes trasladaron el secuestro a la base operativa, donde se procedió a la apertura de los “chanchos”, y encontraron una gran cantidad de atados de cigarrillos -cerca de seis mil paquetes- y un centenar de kilos de hoja de coca, todo enviado al Juzgado de turno.l